BRISTOL es ideal para los bocetos, croquis e ilustraciones y para los dibujos o grabados. Su superficie duradera sin estructura permite utilizar este papel para las técnicas secas y húmedas de dibujo. Lápices convencionales y de color, rapidógrafos, plumillas, rotuladores calibrados y markers acrílicos se deslizan con homogeneidad sobre la superficie lisa. Además, BRISTOL permite el trabajo con el aerógrafo.
El papel es de color blanco claro y tiene un gramaje de 250 g/m2 y una opacidad alta. Su densa superficie hace que los trazos y los colores se plasmen con exactitud. La alta blancura del papel permite escanear y extraer las imágenes de forma sencilla, sin tener que retocar de forma laboriosa. BRISTOL es resistente al borrado, se deja cortar con facilidad y, como papel de gran calidad para dibujos, es especialmente adecuado para las presentaciones.
